De pronto
el planeta enmudece
ya no hay respuesta.
Las voces quedan
sepultadas
en este lugar.
La palabra
se estremece
de tanto agobio
por carecer
de lo imprescindible.
Labios de nicho
nos rodean.
La hermosura del argumento
se diluye
toda la noche
en aguas
que conducen
a ningún lugar.
La pregunta vaga
entre velos
hasta encontrar
el motivo
de tan minúscula
forma existencial.
Equivocamos el rumbo
en esta órbita
que se dirige
donde la explosión del desborde
crea viejas constelaciones.
el planeta enmudece
ya no hay respuesta.
Las voces quedan
sepultadas
en este lugar.
La palabra
se estremece
de tanto agobio
por carecer
de lo imprescindible.
Labios de nicho
nos rodean.
La hermosura del argumento
se diluye
toda la noche
en aguas
que conducen
a ningún lugar.
La pregunta vaga
entre velos
hasta encontrar
el motivo
de tan minúscula
forma existencial.
Equivocamos el rumbo
en esta órbita
que se dirige
donde la explosión del desborde
crea viejas constelaciones.
MARCIA FLANDES.
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